Una mare d'un col·legi de El Saler comparteix amb pares, mares i docents les seues preocupacions i inquietuds. Donem la veu a la gent que des dels centres baralla per l'escola pública.
Hola. Soy
una madre más de la Zona de El Saler con
dos hijas: una en 1º de la ESO en el Instituto del Saler y la otra en 1º
de Primaria del Lluis de Santàngel. Y escribo esta carta para animaros a que
comprendáis y enfrentéis los recortes que ya hemos sufrido en educación y los
que vendrán.
Nosotros vivimos a 10 kilómetros de
distancia del Colegio o Instituto (público o privado) más cercanos. No hay
ningún otro. Y cada día nos lo ponen más fácil: el coche familiar lo utilizamos
para ir a trabajar. No tenemos otro: qué le vamos a hacer. Trabajo en la
Sanidad y como muchos profesores y maestros, ya sé qué es que te desaparezcan
por la magia de los recortes el 50 % de mi antigüedad profesional, la paga
extra de Navidad, el 5% del Gobierno anterior y la subida del IRPF y del IVA
del actual. ¿Alguien da más?
Pues sí: la Consellería de Educación
siempre da más. Ejemplo: “Si eres padre de un niño de 3-5 años con tu
plaza para esclarizarlo en Infantil te rascas el bolsillo y te lo llevas tu al
Cole que lo tienes al ladito de casa -entre 5 y 12 km- y nos pagas la comida. O
si no, coges el autobús de línea -ah! que no hay, perdón. Y si no, pues te lo
quedas en casa, que lo del fracaso escolar ya lo arreglaremos más adelante
cuando se haga mayor. Si eres madre de un niño de Primaria nos lo dejas a
comer: no pasa nada, nuestra magnífica Escuela Pública Gratuita te lo permite:
p-a-g-a-n-d-o”. Mira por dónde aquí contesto yo que no quiero ni puedo
“recortarme” más. “Pues entonces vente
con ese coche familiar que se lleva tu marido todos los días a trabajar o ese
autobús que pasa cada hora y te lo recoges a las 13 h. le das de comer y nos lo
vuelves a traer a las tres. ¿Qué te parece?”. ¿Gratis? -pregunto yo. “No, no, de eso nada: como vives cerca, o
sea, entre 5 y 12 Km, solo te costará su comida alrededor de cinco euros
diarios, o sea, unos 70 al mes durante 10 meses claro. Una ganga”. ¿Y si
los se traen la comida de casa?-pregunto yo. “No, no, no, de eso nada: se nos puede envenenar por el trayecto y
nosotros no nos hacemos responsables: así que, o pagas y vienes y te lo llevas
y lo vuelves a traer, o come fuera del centro. Vamos que o pagas o pagas”.
En fin, amigos, una ganga lo de
la Escuela Pública Gratuita Obligatoria a cargo del Estado: el comedor de la
niña pequeña -unos 800 al año- más 200 en libros y material escolar. Llevo ya
1.000 al año, que sumados a los recortes
que ya padecí...prefiero ni pensarlo. Total no tengo de qué quejarme pues van a
ser 1.000 euros por niño, o sea, 2.000 en mi caso por ser tan imprudente y
tener dos, que por los seis años de primaria y los seis de Secundaria (si
llegamos vivos, claro, o no repite algún curso) sumarán... -¡¡venga sin
miedo!!- ¡UNOS 12.000 EUROS POR HIJO! Y si tienes dos... ¡24.000! Eso es
Escuela Pública Gratuita. Menos mal que tengo a la mayor en 1º de la ESO.
Y ahora me pregunto, ¿qué error cometí en
esta o en la otra vida? Pues vivir en
una población dentro de un Parque Natural en una zona rural de un Municipio
urbano siempre tan preocupado por cubrir
las necesidades de todos, todos sus habitantes y en especial de los más
pequeños. Uf! Menos mal que no tengo
otro de 3 años en Infantil pues si así
fuese me tocaría pagarle a su vez -¡ya les ha pasado a 82 padres de Infantil y
a algunos de Bachillerato!- un autobús privado durante tres años, también por
otra ganga de 85 euros al mes. “Mare de
Deu... ¡Paco!, vasectomía, ya!”
Pero lo que más me fastidia es que a mi
alrededor la gente es de un comprensivo, de una sensibilidad social, de un
solidario que aplasta: no han entendido nada, o solo les preocupan las cosas
cuando les afectan a ellos. ¿No os dais cuenta que la Escuela Gratuita es un
Derecho y que cuando van mal las cosas es cuando más gratuita debería ser? ¡Hay
que ser burros! Es como si nos estuvieran regalando algo: ¡como si los
comedores públicos fueran algo extraordinario! ¡Pero si lo pagas ya con tus
impuestos! ¡Pero si los hay hasta en China! ¡Como si los libros de texto
tuvieran que ser inexorablemente tan caros, tan imprescindibles, tan
intocables! ¡Como si, el que te lleven y te traigan los hijos a la Escuela
Pública (Infantil, Primaria y Secundaria), fuera un lujo que yo he escogido!
¿Habrá que explicar lo que es un derecho? ¿O a qué dan derecho los impuestos
que super-pagamos? El 2013 nos coja más unidos... o confesados.
Y a eso voy: esta semana del 16 al 18 los
padres tenemos la oportunidad de dar la cara por la educación de nuestros
hijos: desde la Infantil hasta la Universidad. La Confederación de miles
de AMPAS nos ha llamado a no llevar a
nuestros hijos a los Coles, Institutos, Universidades. No hay excusas. Luego no
te quejes si no te llega o si no puedes pagarle los estudios o si te has
quedado en paro y no puedes pagar el comedor con la ayudita que te van a “dar”,
o si en las aulas los profesores ya no puedan atender adecuadamente a 35
alumnos -más el tuyo 36- pues a los profes ya les pusieron a trabajar más horas
cobrando menos-, o si la maestra de Infantil no tiene ninguna ayuda en el aula
y te lo devuelven cagadito y meadito. De momento: ves ahorrando, no para los
muebles, sino para abrir un plan de ahorro para los estudios de tus hijos. Nos
va a hacer falta. ¿Y por qué? Porque cuando debimos “saltar” de uñas, no lo
hicimos.
Estamos a tiempo de frenar la mayor
salvajada de recortes en educación llevada por ningún Gobierno. Hay que
defender la gratuidad de la Escuela Pública (Infantil, Primaria y Secundaria la
Obligatoria y la Post-obligatoria) y cuando decimos que tenemos derecho a una
Escuela (Infantil, Primaria y Secundaria) Pública, Gratuita y de Calidad nos
estamos refiriendo a todo. ¿O te va a hacer gracia una Sanidad Universal
Pública y Gratuita donde te acabe costando 1.000 euros la prótesis de cadera
más 500 por la estancia más 500 por las medicinas más 1000 por las pruebas de
mamografía? ¿Eso es gratuito? Echa cuentas.
Despertad del letargo, de este engaño
-estafa, le llaman otros- que nos va a dejar en la miseria -una miseria de
derechos -que serán irrecuperables- y de dignidad.
Por
eso como madre afectada por el futuro tan esperanzador que nos dibujan nuestros
gobernantes os animo a decir ¡No! ¡Queremos el derecho para nuestros hijos a
una Enseñanza Pública, Democrática y Participativa, Gratuita y de Calidad en
todos los niveles educativos, como en la Sanidad! ¡Queremos autobuses y
comedores públicos y gratuitos para los alumnos de zona, los de Infantil, los
de Primaria, los de la ESO, los de Bachillerato! ¡Queremos nuestros derechos,
que ya pagamos con nuestros impuestos! ¡Queremos que maestros y profesores se
solidaricen con nosotros los padres y que, como nosotros hicimos en sus huelgas
del curso pasado, pongan su granito de arena para apoyarnos vaciando las aulas
el 18 de octubre! Y lamentándolo mucho, quien no entienda de qué estoy
hablando, le digo que tiene y va a tener lo que se merece. Olvídate de
vacaciones, de viajes para ver algo que te interesa, de compras caprichosas
porque bastante será si tienes lo necesario para darles una educación digna y
de calidad a tus hijos.
Me he decidido a escribir esta carta movida por una sola pasión: llamaros a
la huelga de padres convocada por las asociaciones de madres y padres de toda
España para el 18 de Octubre no llevando a nuestros hijos a ningún nivel
educativo. Molestémonos durante un día por lo que queremos para toda una vida.
Demostrémosles
que para mandar hace falta algo más que cojones y eso se llama ‘razones’.
Gracias.
Quienes dicen que ellos
no apoyan la huelga porque es política, quieren decir que tienen razones
políticas para no apoyarla. Porque tan política es la decisión de ir a la
huelga, como de No convocarla. Es una postura común de la derecha tratar de
descalificar al adversario diciendo que es “político”. Por ejemplo Wert, que es
ministro de Educación, inspirador de la retrógrada LOMCE, afiliado al PP y
ultraconservador; si de algo se le puede definir es como “político”.
La política
se orienta hacia la toma de decisiones para la
consecución de los objetivos de un grupo en asuntos públicos. Los ciudadanos
y ciudadanas de un país estamos llamados a participar en los asuntos que nos
conciernen. Al menos en los países donde existe alguna forma de democracia (por
parcial que sea), donde no hay una dictadura abierta, las personas tenemos
espacios para opinar y actuar libremente. Es normal que los que no están a
favor de la libertad, quieran desprestigiar la política.
